México, 24 de abril, 2016 (Notimex). Después de tres años de investigación fue publicado el libro “Los señores del oro. Producción, circulación y consumo de oro entre los mexicas”, cuyo objetivo es adentrarse en el conocimiento del metal y su importancia como símbolo de estatus.
De la autoría de Oscar Moisés Torres Montúfar, el material fue editado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y presentada en el Museo del Templo Mayor.
El volumen explica cómo llegaba el metal a México-Tenochtitlan, via tributo y gracias al comercio, y cómo se destinaba a los altos gobernantes.
Gobernantes como huey tlatoani (gran señor), mostraba su estatus portando una diadema de oro, símbolo de nobleza y jerarquía, así como narigueras, orejeras, brazaletes y colgantes, elaborados con dicho material y con piedras y plumas preciosas.
Según Torres Montúfar, los gobernantes mexicas también utilizaban este metal para sellar alianzas y acuerdos políticos y diplomáticos, como cuando Moctezuma Xocoyotzin remitió una cantidad de regalos de oro al ejército de Hernán Cortés y sus aliados indígenas, según lo relatado por Bernal Díaz del Castillo (1492-1585).
El investigador añadió que los centros de extracción del oro se ubicaban en la sierra de los actuales estados de Guerrero, Oaxaca y Chiapas.
Una vez que estas poblaciones fueron conquistadas por los mexicas, se les exigía que periódicamente suministraran materias primas: telas de algodón, plumas preciosas y oro.
“En Tenochtitlan no hubo gran cantidad de oro, como en otros sitios prehispánicos de Sudamérica, sin embargo, una de las apuestas de este libro es dar a conocer que la escasez de este metal fue un factor histórico. Si el oro hubiera sido una materia prima abundante no habría sido valioso”, consideró.