La película del director israelí Eitan Tzur se exhibe en la
Cineteca Nacional.
Los celos y las decepciones amorosas pueden hacer perder la
cordura y la elocuencia, causar dolor y rabia, y hasta en la persona más
estable, perder el control de la vida y sus emociones; son éstas las
circunstancias en las que sustentan el argumento que nos ofrece el director
israelí Eitan Tzur en su película Una joven y bella esposa (2010), que forma
parte de la cartelera de la Cineteca Nacional.
Se trata del primer largometraje de este director,
mayormente conocido por su trabajo para la televisión de su país, y quien
debutó en el cine con este drama ficción sobre la diferencia de edades en una
relación amorosa y sus complicaciones.