París, 19 de octubre, 2016 (AP). A pesar de las tensiones diplomáticas entre Rusia y Francia, la alcaldesa de París Anne Hidalgo asistió el miércoles a una ceremonia para inaugurar un centro cultural ruso que incluye una catedral cristiana ortodoxa al lado de la Torre Eiffel.
El presidente ruso Vladimir Putin había planeado asistir a la ceremonia en el corazón de la capital francesa pero canceló en medio de un desencuentro con el mandatario francés Francois Hollande sobre la guerra en Siria.
Putin postergó el viaje luego que Hollande insinuó que Rusia debía ser acusada de crímenes de guerra por sus bombardeos contra la ciudad siria de Alepo. El mandatario francés indicó luego que Putin aplazó el viaje cuando se le informó que Hollande no participaría en la inauguración del templo y que lo único que le interesaba era hablar sobre la situación en Siria.
"Me agrada que la catedral y el centro cultural ruso tienen un lugar en París", dijo Hidalgo, una aliada de Hollande. "Un lugar que simboliza la amistad entre dos pueblos".
Entre los dignatarios presentes en la ceremonia estaba el embajador de Francia en Rusia, Alexander Orlov.
El complejo, que incluye la Catedral de la Santa Trinidad, está construido en el lugar que antes ocupaba la sede del servicio meteorológico nacional francés, cerca del río Sena. En el lugar, donde hay también una escuela y una librería, fue vendido a Rusia bajo el gobierno del presidente anterior Nicolas Sarkozy, en medio de denuncias de grupos de derechos humanos por la situación bajo el gobierno de Putin.
El presidente ruso fue al lugar en el 2010 y negó versiones de que el edificio sería usado por los servicios de seguridad rusos.
La iglesia fue diseñada por el arquitecto francés Jean-Michel Wilmotte e incluyo cinco cúpulas doradas. La mayor pesa ocho toneladas y mide 40 metros de alto.