DETROIT (Reuters) - El Instituto de Artes de Detroit, reconocido por los murales pintados por Diego Rivera, inaugurará este mes una exhibición pública de sus trabajos y los de su esposa, Frida Kahlo, la mayor muestra desde que la colección del museo se vio amenazada durante la bancarrota de la ciudad.
"Diego Rivera and Frida Kahlo in Detroit" incluirá casi 70 obras de los artistas mexicanos y es la primera en centrarse en los 11 meses que la pareja pasó en la ciudad en 1932 y 1933, cuando Rivera trabajó principalmente en los murales "Detroit Industry".
Los dibujos preparatorios de Rivera para los frescos de 27 paneles, que no se han mostrado en casi 30 años, serán parte de la exhibición que comienza el domingo.
La idea de la exhibición surgió hace más de una década, pero la incertidumbre sobre las finanzas de la institución, que pertenece a la ciudad, y otros reveses retrasaron el proceso, dijo el director del museo, Graham Beal.
Decenas de trabajos se obtuvieron de préstamos de otros museos en Estados Unidos y México y de coleccionistas privados.
"Cuando supimos que seguiríamos, volvimos sobre la idea de la exhibición de Rivera, basada en los murales de Rivera", dijo Beal.
El conservador Mark Rosenthal se asoció con expertos en trabajo, medicina y la comunidad mexicana estadounidense de la ciudad para darle a los visitantes una idea de lo que era la vida para los artistas en la época de la Gran Depresión en Detroit.
Juan Coronel Rivera, nieto del muralista, dijo a periodistas que fue sobrecogedor investigar sobre su abuelo pero que el proyecto le ayudó a entender mejor su contribución al arte moderno.
Su investigación incluyó analizar archivos de cartas que Rivera escribió a Kahlo cuando ella partió de Detroit para acompañar a su moribunda madre en México, agregó.
"Cuando el mural se terminó, fue la pieza de arte moderno más importante en Estados Unidos", dijo Rivera.
Rivera, cuyos murales que celebran temas revolucionarios con frecuencia generaban polémica en Estados Unidos, consideró la obra "Detroit Industry" como su mejor trabajo y figura entre las piezas del museo más famosas.
En Detroit, Kahlo, por entonces una artista desconocida atormentada por temas de fertilidad y una aversión a la cultura estadounidense, desarrolló sus obras más famosas, incluida "Henry Ford Hospital", que fue prestada por el Museo Dolores Olmedo de Xochimilco en México.