UNESCO Director-General, Irina Bokova |
BERLÍN (AP) -- La agencia cultural de Naciones Unidas dijo el lunes que la destrucción de antigüedades y sitios históricos en zonas en conflicto por parte del grupo Estado Islámico y otros movimientos extremistas podría equivaler a crímenes de guerra.
El Comité de Patrimonio Mundial de UNESCO, reunido en Bonn, observó la destrucción causada por Estado Islámico en la antigua ciudad de Hatra en Irak y manifestó "profunda preocupación" por los tesoros arqueológicos en la ciudad de Palmira, Siria, capturada por los extremistas en mayo. Ambas están en la lista del patrimonio de la humanidad que lleva la organización.
"Los ataques intencionales a edificios dedicados a la religión, la educación, el arte, la ciencia o propósitos benéficos, así como a monumentos históricos, pueden equivaler a crímenes de guerra", dictó el comité en una resolución.
En abril, la fiscal de la Corte Penal Internacional Fatou Bensouda dijo haber recibido denuncias de atrocidades generalizadas en Siria e Irak por parte de Estado Islámico, como también la "destrucción injustificada de propiedad cultural", pero agregó que no iniciaba una investigación debido a que ninguno de los dos países es miembro de la corte y los sospechosos no tienen el rango suficiente como para ser procesados.
En su resolución, UNESCO manifestó "una profunda conmoción" por los ataques reiterados del Estado Islámico y otros grupos "destinados a destruir la diversidad cultural atacando deliberadamente a individuos y comunidades con base en sus antecedentes culturales, étnicos o religiosos, como también lugares de culto, tradición y aprendizaje".
Asimismo expresó alarma por el número creciente de amenazas al patrimonio cultural por medio de saqueos y excavaciones ilegales, "que socavan seriamente tesoros culturales irremplazables, entre ellos sitios de patrimonio mundial de UNESCO en Afganistán, Irak, Libia, Mali, Siria y Yemen".
UNESCO también advirtió que hay sitios de patrimonio mundial natural en Níger, Congo, República Centroafricana y Costa de Marfil que se ven afectados por problemas "que probablemente se prolongarán más allá del fin de las hostilidades".