LONDRES, 19 ene (Reuters) - El príncipe Enrique habló el domingo sobre su tristeza por verse forzado a renunciar a sus deberes reales en un acuerdo con la reina Isabel y los Windsors que le obligará a él y a su esposa Meghan a abandonar sus roles oficiales activos y buscar un futuro independiente de la familia real.
El Palacio de Buckingham y la reina anunciaron el sábado que Harry y Meghan ya no serían miembros activos de la monarquía británica, ya no usarían sus títulos de “alteza real” y deberían pavimentar su propio camino en la vida, liberándolos para forjar nuevas carreras.