lunes, 7 de septiembre de 2015

Nueva generación de muralistas mexicanos

MEXICO (AP) -- El arte mural de México pasa por una transformación hacia la modernidad.

Ex grafiteros y diseñadores gráficos se han unido en una cooperativa llamada "Street Art Chilango" para pintar muros con personajes populares de La Guerra de las Galaxias y promocionar sus trabajos en medios sociales.

Fundado en marzo de 2013 por Jenaro de Rosenzweig y Alejandro Revilla, el grupo emplea el término "chilango", que en argot se refiere a las cosas que proceden de la ciudad de México.

Pero sus murales no están solo sobre paredes de ladrillo y mortero.

Rosenzweig, que responde al nombre artístico de Jenaro, promueve con insistencia los trabajos del grupo en redes sociales así como en su cibersitio, streetartchilango.com. La cooperativa tiene más de 165.000 "me gusta" en Facebook, 72.000 seguidores en Instagram y 9.000 en Twitter.

El grupo, apunta Jenaro, tiene el músculo de la red social y el cerebro para que los artistas trabajen.

En abril de 2013, lanzó la etiqueta "(hash)streetartchilango" para que cualquier usuario de Instagram pudiera ubicar las localizaciones de sus obras en el mapa interactivo de Google del servicio.

La gente aceptó bien la iniciativa y comenzó a usarla, dijo Jenaro recordando que poco después comenzó a conocer a esos artistas.

Ante el interés generado por el mapa interactivo, Jenaro diseñó una ruta por la ciudad de México para visitar muchas de las localizaciones presentes en la web. Todavía siguen organizando estos recorridos casi cada fin de semana.

Aunque muchos de ellos comenzaron como grafiteros, ahora los miembros del grupo pueden ganarse la vida llenando las paredes con su pintura.

En las últimas semanas, el miembro de Street Art Chilango Andrik Figueroa Barreto, cuyo nombre artístico es Andrik Noble, realizó varios murales con temática de La Guerra de las Galaxias, incluyendo uno con soldados imperiales más de 18 metros (60 pies) en el mercado de Michoacán. El artista, con las manos y la ropa todavía cubiertos en pintura, apunta que no tiene un estudio donde trabajar y que toda su obra está en las calles.

El empresario Pascual Medina Ortiz sonríe al señalar el retrato de la princesa Leia realizado en espray delante de su tienda en el vecindario de Condesa, contento ante el reclamo turístico que suponen las obras.

A tres kilómetros de allí (dos millas), Beatriz Ávila Haro, que también forma parte del grupo, trabajaba sobre un andamio a varios metros del suelo mientras aplicaba pinceladas de color negro sobre una pared blanca.

Ricardo del Razo, el arquitecto encargado de ese proyecto, apuntó que el mural de 3,6 metros (12 pues) mostrará a una mujer presionando un lápiz contra una mesa de dibujo "ideando la forma de resolver problemas".

Los murales y el arte callejero tienen un largo recorrido en México. Ya en la década de 1920, Diego Rivera, David Siqueiros y José Orozco pintaron edificios públicos con mensajes sociales y políticos, estableciendo los murales como una forma artística eminentemente mexicana.

El proximo paso del grupo llegará en noviembre en el festival Art Basel de Miami, donde Jenaro y Ávila esperan mostrar un mural al público internacional con el que esperan "volar la mente" de los asistentes, dijo Jenaro.